Sin darme cuenta ya es jueves, he tenido mucho trabajo por lo que los días y las semanas han pasado muy rápido. También me la he pasado viajando; mirando hacia atrás me doy cuenta de que en un mes he estado en Tijuana, San Diego, Los Ángeles, Cancún, Playa del Carmen, Oaxaca … y ya estoy planeando los siguientes viajes, en su mayoría de trabajo.
Es excitante, no lo niego, aunque también extraño no dormir en mi cama, no bañarme en mi baño, no ir a mi oficina; sin exagerar te puedo decir que ayer estuve ahí después de dos semanas de no poder poner un pie por SDF - Soluciones Desarrollo y Formación, así se llama mi empresa.
Si me sigues en Twitter te habrás dado cuenta que esta tarde no tenía ningún artículo listo para publicar en Nueva Chamba; cínicamente te confieso que en lugar de ponerme a escribir me puse a verBrothers & Sisters, y escribí en mi Twitter: "Inspiración, ven a mi", sabiendo que algo tenía que pasar.
Finalmente la inspiración llegó y me di cuenta que a veces tanto ajetreo hace que pierdas el enfoque, que olvides cuál es tu propósito y recordé que eso mismo pasa a las personas que están en la búsqueda de nuevas oportunidades de trabajo, normalmente empiezas con muchos ánimos, pero la rutina de todos los días, el ajetreo de tus asuntos personales hace que de pronto pierdas tu objetivo, que te desanimes y dejes de buscar trabajo.
Me puse a investigar y según datos del INEGI en el país existen 5 millones 343 mil personas disponibles para trabajar que han desistido de buscar empleo, la mayoría –98 por ciento- porque considera que no tiene posibilidades de conseguirlo.
El INEGI detalla que 14.7 por ciento de la Población No Económicamente Activa (PNEA) está en esta situación de desánimo. Es decir, se considera con capacidad para integrarse al mercado laboral, pero ya se dio por vencida, o de algún modo perdió el enfoque.
Por sexo, a quienes afecta más tocar puertas y que éstas no se les abran para conseguir un trabajo es a los hombres.
Detalla la encuesta que 19 por ciento de la PNEA de los hombres, están disponibles a un empleo pero no creen encontrarlo, contra 13 por ciento de las mujeres.
Al respecto, 14.4 por ciento de la población no económicamente activa que tiene preparatoria y estudios superiores, se declara desanimada para seguir buscando un empleo. Esto equivale a 650 mil personas aproximadamente.
Por increíble que parezca, el desánimo en la gente que busca trabajo, después de un corto tiempo de no tener éxito, deja de explorar nuevas oportunidades.
Por eso recomiendo mantener el enfoque, recordar siempre cuál es tu propósito, a mi con tanto ajetreo ya se me estaba olvidando.
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